29
de febrero de 2016
En estas semanas deberíamos planear
de acuerdo a las necesidades del grupo en los aspectos de español y
matemáticas, para esto se pensó que en el grupo de segundo a, se reforzarían
las vocales y el conteo hasta el numero 20 escritos hasta el número 10.
Comenzamos el día recordando como
saludar a la bandera porque era lunes y había que hacer honores, también como
debíamos estar mientras estuviera la bandera y como cantar, nos fuimos al salón
de música formados en una fila por estaturas, durante los honores se mostraron
atentos a las indicaciones y en esta ocasión no platicaron tanto como otras
veces, se corregían unos a otros y preguntaban si lo estaban haciendo bien.
Al regreso a clases, trabajamos con
un calendario del mes, que había hecho en una cartulina, donde les marque que
terminábamos un mes y comenzábamos con otro, además de las clases que no íbamos
a tener, contamos también las letras que tenía el mes y cuantos conformaban un
año, la maestra Faby les explico los numero en los meses, como iban cambiando y
el orden que estos tenían. Después de esto pusimos la fecha correspondiente y
comenzamos las actividades del día en los libros de actividades con el número
dos.
Revisamos donde encontrábamos el
número dos y como se hacía, para que después ellos lo marcaran con crayola.
Conforme iban terminando, iban realizando las actividades que tenían atrasadas,
los que estuvieran al corriente, podían agarrar un cuento, así los esperamos hasta
que terminaron todos y con la consigna busca en la parte del título la letra a
comenzamos regresamos al tema de las vocales, en el caso de Paloma, menciono
que ella no tenía letras a en su título ni en la persona que lo había escrito,
así que los que dijeron que si, compartían cuantas letras a había y si eran
mayúsculas o minúsculas. Dejamos esa actividad pendiente, después desayunamos y
la maestra Faby felicito a aquellos que traían fruta y se alimentaban
sanamente.
Al regresar del recreo, dimos unos
minutos para que descansaran y tomaran agua, después continuamos con la letra
a. Les mostré unas imágenes relacionadas con el inicio de la letra por ejemplo
abeja, pregunte si podíamos escribirlo y comentaros que sí, comenzaba con la
letra a y cuestione si sabía que era lo que seguía para escribirlo Geraldine
comentó que seguía la b de Gilberto, en el pizarrón solo escribí la letra b
para preguntar si así estaba bien escrito o faltaba algo y Juan Pablo comento
que la a para que diera abeja.
Les mostré después la imagen de un
avión y el mismo ejercicio que hicimos con la anterior lo íbamos a hacer con
esta, pero para esta ocasión ellos lo iban a escribir, Sofía comenzó a escribir
y puso A preguntando si de esa manera era correcta, me dijo que si porque es el
inicio de una palabra, después pasó mateo y me dijo que pondría la b porque se
escuchaba parecido a abeja, y como en avión esa seguía, Juan Pablo dijo –
maestra esa termina en on – y paso a escribirlo; la maestra Faby les cuestionó
si estaba bien escrito o le hacía falta letras, repetimos la palabra y Mística
mencionó que le hacía falta la letra i, la escribió después de la o porque ya
estaba escrita antes pero dijo que ahí
estaba bien.
Finalizamos con la imagen de la
araña, Cristopher Adán, me ayudo a escribir la letra a y Juan Pablo me dijo que
él sabía lo que seguía, cuando llego al pizarrón, me dijo ere no sé cómo se
escribe ara, sé que lleva una a pero no sé lo que va antes para que suene ara,
le mencione que el escribiera la lera que le sonara, y escribió la eme, y
después la a, le pedí a Julián que me ayudara a terminar la palabra, con
inseguridad me dijo que no sabía, le dije a qué te suena que termine araña, me
dijo que con la letra a, pero no sabía hacer la chiquita, le dije que
escribiera la que pudiera e hiso la A.
La siguiente actividad era que
moldearan con la plastimasa la letra que estábamos viendo, pero al repartir el
material, nos dimos cuenta de que la plastilina estaba echada a perder, ya que
estaba muy plegostiosa, así que suspendimos la actividad y la maestra Faby
pidió que les leyera un cuento, no estuvieron de acuerdo con el cambio de actividad,
porque ellos querían moldear en plastilina accedieron.
Así fue como les conté el cuento de
¿Por qué sin importantes los sombreros? Donde algunos niños como Orlando y
Mateo estuvieron unos momentos inquietos, pero otros sí estuvieron atentos y
participando, como Sofía, Zoe, Valentina, Juan Pablo, Adán, entre otros.
Me sorprende la actitud
participativa de Adán y la diferencia de querer hacer las cosas, para que me
pongan atención en algunas actividades espero utilizar una estrategia mediante
una colección en sus cuadernos, donde ellos puedan ver su avance y las cosas
que hacen bien, algo como una bitácora personal, así también se mostraran las
participaciones, la limpieza y lo que han hecho en clase o en las actividades.
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